OJITOS
« VOLVER

Ojitos llegó al borde la muerte, con una sentencia de eutanasia pendiendo sobre su cabeza. Víctima del moquillo y de unas infecciones terribles que, literalmente, se lo estaban comiendo vivo. Estuvo internado 52 días, tiempo durante el cual los veterinarios tuvieron que amputarle las patas y la cola para que pudiera salir adelante. Ojitos, hoy, es un canto a la vida, un símbolo de esperanza, siempre alegre, curioso y con mucho amor para dar.



Refugio El Campito 2012 - Todos los Derechos Reservados